Pinturas de Van Gogh impresas en 3D
Crecí en los años 80-90 en un pequeño rancho de las afueras de Boston, con varias reproducciones de cuadros del Museo de Bellas Artes de Boston en el salón de mi casa. No eran más que réplicas, pero me encantaban porque eran una forma estupenda de trasladar parte de la magia de mi museo favorito a nuestra casa, donde podíamos convivir con ellas en el contexto de nuestra vida cotidiana. Incluso tenían una textura que sugería pinceladas. Pero reconozcámoslo: no era lo mismo que ver los cuadros en el museo. 30 años más tarde, un grupo de investigadores del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial (CSAIL) del MIT acaba de publicar un artículo sobre un nuevo método para reproducir cuadros que, según afirman, es cuatro veces más preciso que los modelos existentes para recrear los tonos de color exactos.
La impresión tradicional, con la que la mayoría de nosotros estamos familiarizados, utiliza sólo cuatro tintas: cian, magenta, amarillo y negro (también conocidas como CMYK). El equipo del MIT/CSAIL utiliza diez tintas superpuestas para conseguir resultados más precisos. Para ello, el equipo desarrolló un modelo de aprendizaje profundo para identificar la mezcla ideal de colores para la pila. También aprovechan la antigua técnica del tramado (que emplea modulación espacial, como los patrones de puntos de los cuadros de Roy Lichtenstein) y el contonado (que combina finas capas de tintas), que mejora la precisión y proporciona un aspecto suave.
Artistas de la impresión 3d
La impresión 3D difumina la línea que separa la tecnología de las bellas artes contemporáneas. Está abriendo un mundo de oportunidades para los que aún se están iniciando en determinados campos o los que quieren salir de su zona de confort integrando distintas disciplinas para crear algo completamente innovador.
La tecnología de impresión en 3D permite a los artistas sin formación en escultura utilizar sus bocetos y diseños digitales para crear esculturas en 3D. El software de impresión digital en 3D también permite a los artistas visualizar el resultado final y resolver cualquier problema de diseño de inmediato, sin tener que desperdiciar material valioso.
Muchos artistas utilizan modelos de trabajo antes de intentar construir la pieza final. Gracias a la impresión 3D, ahora los artistas pueden crear modelos a medida que les ayudan a visualizar su obra de arte un poco mejor que un boceto.
Los artistas comerciales utilizan la impresión 3D para crear modelos hiperrealistas del decorado de una película, el atrezzo, el vestuario y los actores. Además, los dibujantes independientes también utilizan la impresión 3D para crear reproducciones tridimensionales de sus personajes, sin tener que depender para ello del visto bueno de las grandes empresas de juguetes o figuras.
Mejor impresora 3d para artistas
ERIN HANSON pinta al óleo desde que tenía 8 años. De joven, trabajó en un estudio de murales creando pinturas sobre lienzo de 12 metros de altura, al tiempo que vendía encargos artísticos. Tras licenciarse en Bioingeniería por la Universidad de Berkeley, Erin se dedicó a la escalada en Red Rock Canyon (Nevada). Inspirada por el colorido paisaje que escalaba, decidió pintar un cuadro cada semana durante el resto de su vida. Desde entonces ha mantenido esa decisión y se ha convertido en una de las artistas más prolíficas de la historia. El estilo de Erin Hanson se conoce como «impresionismo abierto» y ahora se enseña en escuelas de arte de todo el mundo. Con miles de coleccionistas que esperan ansiosos sus obras y millones de seguidores en Internet, Hanson se ha convertido en una fuerza icónica e impulsora del renacimiento del impresionismo contemporáneo.
Proyectos artísticos con impresoras 3D
Cuando en 2013 la plataforma de software Autodesk invitó al célebre escultor Bruce Beasley a organizar una exposición sobre impresión 3D en San Francisco, se mostró encantado; al fin y al cabo, no todos los días un artista tiene la oportunidad de enfrentarse cara a cara con una tecnología de vanguardia. «El modelado por ordenador y la impresión en 3D me permiten hacer esculturas que no podría realizar de ninguna otra forma. El impulso creativo sigue siendo el mismo independientemente de las herramientas que utilice el artista, pero es liberador y emocionante explorar un nuevo vocabulario de formas -en parte mecánicas, en parte orgánicas- que son posibles gracias a las innovaciones tecnológicas», afirma.
Desde el aumento de la oferta de impresoras de consumo a principios de la década de 2010, la impresión 3D es mucho más accesible para artistas y diseñadores. Muchos artistas que antes tenían dificultades para dar vida a conceptos específicos debido a las limitaciones de material y producción son ahora libres de explorar la nueva tierra de oportunidades que es la impresión 3D. Desde la personalización y la versatilidad hasta la sostenibilidad y la rentabilidad, la impresión 3D ha demostrado ser especialmente beneficiosa para muchos en el mundo creativo.